¿El fin de ETA?

Tras el comunicado de la banda terrorista del "cese de la actividad armada" del 20 de octubre,la primera sensación que me produce es una inmensa alegría por los que no morirán a sus manos a partir de ahora y por los vascos,principalmente, que podrán empezar a vivir sin tantos miedos.
Pasada esta sensación, me quedo con la parte repulsiva del comunicado en el que mencionan a sus muertos y encarcelados pero se callan los cientos de asesinados por ellos y me entran las dudas.¿serán sinceros?¿no será un nuevo engaño?.
Lo que está claro es que no se produce por un convencimiento de que su actividad terrorista es un error y un horror, sino porque han sido golpeados y acorralados y se les han cerrado las salidas, y ésto, pese a quien pese, se ha producido tras una gestión impecable del actual Gobierno del PSOE y especialmente de Rubalcaba.
Es curioso escuchar ahora a González Pons decir que la política antiterrorista del Gobierno estaba pactada con el PP. ¿Se puede olvidar la utilización permanente del terrorismo por parte del PP para atacar al Gobierno, acusándole una y otra vez de colaborar y pactar con ETA?
Ejemplar e impecable el discurso de Zapatero, adjudicando el éxito a todos los Gobiernos de la democracia.
Inteligente y esperanzador el discurso de Rajoy, pidiendo, sobre todo a los suyos,moderación y altura de miras y afirmando sin vacilación que no ha habido concesiones.
Terrible la respuesta de los trogloditas de la caverna mediática y de algunos del PP como Mayor Oreja. Pareciera que si desaparece ETA, lo terrible para ellos es que se quedan sin aliento y pierden su tema central vital de acusaciones al Gobierno.
Difícil papel le queda a Rajoy, si, como parece, gana las próximas elecciones. Deberá controlar y dirigir el proceso de Paz y mientras, tendrá que soportar a los recalcitrantes que seguramente no le perdonarán lo que ellos considerarán como desvío del camino recto.
Y en fin, ¿ será verdad el final de ETA?
Mientras tanto, a las víctimas se las debe total consideración y apoyo y el cariño y comprensión de todos.
Ahora lo que debe primar es que los políticos conduzcan el proceso para enterrar definitivamente el terrorismo y conseguir que no vuelva a haber más víctimas.