Y más incontinencia

¿Qué decir de las patochadas de Sánchez Dragó?
Evito voluntariamente decir Señor Sánchez Dragó, porque de Señor, ha demostrado que no tiene nada.
En una tertulia de radio dice a Jiménez Losantos que se arrepiente de no haberse casado con su propia hija y ahora en un libro de charleta con Albert Boadella se regodea de haberse acostado con dos niñas de 13 años. En muchas ocasiones ha confesado que le gustan las jovencitas.
La derecha ultramontana está que se sale. Se encuentra en su salsa y hasta con derecho a pernada.Ya ni disimula.
Las reacciones de los políticos serían curiosas si no fueran,como son, escandalosas. Mariano Rajoy envia un mensajito de teléfono al León ofreciéndole su apoyo, olvidando que lo que el León ha hecho no ha sido rugir, sino ladrar.
Esperanza Aguirre, apoya a S.Dragó porque es literatura. Habría que ver su comentario si lo hubiera dicho un "literato" de izquierdas.
Y no voy a entrar en la cabriola ideológica de Albert Boadella; el giro que ha dado en los últimos tiempos es tan brusco que puede provocarse algún dislocamiento en el intelecto.
Tras ésto, espero que ante la próxima visita del Papa, además de retirar a las prostitutas de las calles de Barcelona, retiren también a Sánchez Dragó de las calles mediáticas y nos eviten su presencia y su audiencia, para el bien espiritual del Papa, y para nuestra tranquilidad cívica.